Chau 2011, hola 2012

Empezaron los días en los que hace el mismo o más calor dentro de casa que fuera. Esa sensación es la que marca para mí el incio del 2012. Nos recibió con brazos acalorados el cabrón año nuevo (envidia de los playeros). Y con varias sorpresas desde la mañana, como, por ejemplo el tremendo asombro que me causó encontrar una persona durmiendo desnuda en el salón de ¡mis abuelos!

Imagino...¿qué hubiera pasado si mi anciana (pero bien conservada) abuela se hubiese topado con esa estampa en la mañana?... Aunque pensándolo bien, a la hora que me encontré con el casi-cadaver del juerguista (digno de un papel en "¿Qué pasó ayer?") la abuela ya había salido a su infaltable misa de los domingos por la mañana.

Estas fechas se hace el respectivo balance de lo ocurrido, vivido, experimentado, sentido en el año acabado. Las conclusiones suelen ser positivas para afrontar este nuevo año como un nuevo reto, una nueva prueba de la cual salir airoso y vencedor. Época de reflexionar acerca de las cosas que hicimos mal y en las cuales no queremos volver a fallar. Veremos si se cumple la profecía maya y seguiremos hacia la siguiente profecía de fin del mundo.

En lo personal, este año 2011, que quedó atrás, fue una revolución en mi vida. Desde que hace un año, a estas alturas -como una señal caída del cielo-, descubrí mi verdadera profesión; a la cual quiero dedicarme durante el resto de mi vida: el periodismo. Contento porque al fin había dado con la tecla a pulsar para continuar con mi evolución y desarrollo en este largo camino llamado vida. Encontré una escuela dedicada única y exclusivamente a formar periodistas, de la cual han salido muchos de los mejores y más destacados comunicadores del panorama nacional.

Muchas aventuras y desventuras desde entonces. Adquiriendo conocimientos básicos para el desarrollo de mi profesión, conociendo cómo funciona el mundillo desde las aulas, topándome con gente muy profesional y preparada que día a día se esfuerzan porque la siguiente generación de periodistas sea cada vez más competitiva y esté a la altura de lo que demande la sociedad. Conociendo gente de todo tipo y aprendiendo poco de muchos y mucho de pocos. Llega un momento en el que hay que ser algo más selectivo y rodearte principalmente de gente que comparta tus sueños y metas, así será más llevadero.

Feliz y prospero año 2012. Me despido con un 'tuit' de (@piahildebrandt) FELIZ AÑO a toda la gente que aquí, en FB, en las calles, donde sea, ha usado su tiempo y su energía para defender las causas que creía justas.