El periodismo de investigación necesita de la participación ciudadana
Seminario. Experimentados
periodistas, nacionales e internacionales, coinciden en la importancia de
investigar al poder y los turbios negocios que manejan.
Con el
relato de sus trascendentes trabajos, periodistas de Francia, Argentina,
Brasil, Ecuador y Perú, resaltaron el papel que juega la labor investigadora de
los medios para apoyar la lucha contra la corrupción. Consensuaron que dicho
trabajo no sirve de nada si no encuentra el apoyo de la ciudadanía para
repudiar actos que dañan el sistema democrático.
“La
sociedad civil en Francia ha jugado un papel muy importante a través de las
ONG’s abriendo procesos judiciales, ya que ellos podían sustituir a las autoridades
para pedir investigaciones”, destacó Karl
Laske, reportero de “Mediapart”.
Investigaciones sobre el financiamiento ilícito de los partidos políticos fueron
llevadas a la luz gracias al trabajo periodístico; las cuales permitieron en
Francia la creación de nuevas leyes de financiamiento político lícito.
Recordó
los casos donde sus investigaciones trajeron consigo la dimisión de un Ministro
de Hacienda por una cuenta oculta en Suiza y el negocio ilegal de armamentos
con países como Libia y Afganistán. Revelaron que Gadafi, fallecido dictador
libio, financió con 50 millones de euros, parte de la campaña de Sarkozy en el
2007. “Esta investigación se está judicializando, y la fiscalía abrió las
investigaciones después de nuestras primeras revelaciones”, concluyó el
periodista francés.
La
periodista argentina, Graciela
Mochkofsky, de la web de periodismo, literatura e investigación “El Puercoespín”, destacó la fuerza con
la que el periodismo de investigación se instauró en los años 90 en Argentina.
“Página12 (medio donde se inició) empezó a hacer las investigaciones del
gobierno de Carlos Menen y las irregulares privatizaciones de las empresas
públicas”, y añadió, “esta administración consistía en una banda de hombres y
mujeres aplicando una política neoliberal y buena parte de su motivación era
enriquecerse y robar”.
Se
publicaron diversas investigaciones bien documentadas sobre los delitos económicos
cometidos por el gobierno. Empero, “más allá de que la condena social fue
grande, no hubo una condena judicial que correspondiera a la magnitud de los
crímenes económicos”. La periodista lamentó que en ocasiones el efecto real de
las investigaciones es decepcionante, mas resaltó lo necesario de continuar
investigando, no solo al poder político, sino también a las estructuras
permanentes de poder como los bufetes de abogados, empresarios y de cómo
funcionan los mecanismos reales de poder.
Otra
de las ponentes, fue la pionera en informar sobre el asesoramiento, para la
campaña presidencial, de Favre al actual Presidente de la República, Ollanata
Humala, allá por abril del 2011. Catia
Seabra, reportera del diario “Folha
de Sao Paulo”, destacó lo fundamental de la labor periodística para sacar a
la luz pública los asuntos ilícitos que el poder pretende ocultar.
Así,
habló sobre el caso Palocci. Ministro brasileño y coordinador de la campaña de
la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, que renunció tras hacerse pública la
investigación sobre un escándalo por irregular aumento de su patrimonio, el
cual se multiplicó por veinte en los últimos cuatro años. “La Folha publicó
durante tres días seguidos reportajes exclusivos sobre el caso Palocci y 20
días después dejó el gobierno”, contó con entusiasmo la periodista brasileña.
El
director de la revista ecuatoriana “Vanguardia”,
Juan Carlos Calderón, subrayó la
importancia del periodismo de investigación como herramienta para “denunciar
los actos de corrupción perpetrados por los sectores políticos en el poder, que
tienen la obligación de rendir cuentas, y también sobre poderes que imponen sus
visiones particulares del mundo en desmedro del bien común”.
Relató
un controvertido caso que le trajo más de una denuncia por parte del propio
Presidente de Ecuador, Rafal Correa Delgado, por haber logrado con sus
investigaciones la dimisión de su primo y dirigente del Banco Central, Pedro
Delgado. El banco estaba dando créditos irregulares a empresas quebradas y
autopréstamos. “Pedro Delgado terminó admitiendo, descubierto por la prensa,
que falsificó su título de Economista por la Universidad Católica de Ecuador;
titulo con el que consiguió cargos públicos”, sostuvo.
“Este
tema nos dice que la corrupción existe siempre: es parte de la corrupción
humana. En el poder hasta el justo peca y se necesita un control social que va
mas allá de las Instituciones Judiciales o el Congreso, se necesita un control
y una preocupación ciudadana”, remarcó el experimentado periodista ecuatoriano.
Finalizando
el Seminario, el respetado hombre de prensa peruano, Edmundo Cruz, periodista de la Unidad de Investigación de “La República”, mostró claros ejemplos
de cómo nuestro país ha sido víctima de descarados actos de corrupción durante
las últimas décadas. “Un buen indicador son los tres últimos presidentes que
hemos tenido: Fujimori, condenado a 25 años por delitos de lesa humanidad;
Toledo, investigado por el Congreso y la Fiscalía por sospechosas compras de
inmuebles; García, investigado por una Megacomisión en el Congreso por
presuntos actos de corrupción”.
También, hizo un llamado de atención al Ministerio Público, mostrando un cuadro con cifras
escandalosas que revelan un trabajo bastante pobre en los últimos años de dicha
institución. “Del 2006 al 2011, la Fiscalía de la Nación registró 319 denuncias contra
altos funcionarios del Estado. De ese total, 255 fueron
archivadas, otras 50 fueron derivadas, 9 fueron acumuladas, 12 están en
investigación y otras 2 figuran simplemente como denuncia”. Asimismo, señaló
que la mayoría de ese total de denuncias fueron puestas a luz por la prensa.
Cruz Vílchez indicó que “representar a la sociedad nos da
fuerza” y esta tarea no sería posible sin un trabajo “conjunto entre prensa y ciudadanía”.
Buen post, para quienes nos perdimos de tan buen seminario sobre periodismo de investigación, los retos que llegaremos a afrontar muy pronto en nuestra carrera profesional.
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